Lunes 17 de junio, San Juan, R.D.- En conmemoración del 25 aniversario del Día Mundial de Lucha Contra la Desertificación y la Sequía, el proyecto “Resiliencia a la Sequía y el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales realizaron un evento donde participaron autoridades involucradas en el tema de sequía a nivel de la región sur.
Bajo el lema “Hagamos crecer juntos el futuro”, las entidades hicieron un llamado a que los países tomen acciones para prever la neutralidad de la degradación de la tierra que proporcione una base sólida para reducir la pobreza global, mejorar la seguridad alimentaria y del agua, y progresar en la mitigación y adaptación al cambio climático.
Durante este evento se realizó el panel “¿Cómo lograr integración nivel local-central para gestionar eficazmente la sequía?” con la intervención de representantes del Ministerio de Agricultura, Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Instituto Nacional de Aguas Potables y Alcantarillados (INAPA), Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INDRHI) y el Instituto Agrario Dominicano (IAD).
Se presentó también el caso de éxito “¿Cómo Israel combatió la desertificación y casos exitosos de la región LAC?” a cargo de David Schwartzman, experto de agua en Israel. En la actividad se presentó la exposición fotográfica “El Rostro de la Sequía” que muestra la afectación de las personas a causa del desastre de la sequía en diferentes comunidades de San Juan de la Maguana.
La celebración del Día Mundial de Lucha contra la Desertificación y la Sequía fue establecida cada 17 de junio por las Naciones Unidas con el fin de concienciar sobre las iniciativas internacionales para neutralizar la degradación de la tierra mediante la búsqueda de soluciones de manera colectiva y a todos los niveles.
Esta conmemoración de los 25 años del Día Mundial de la Lucha Contra la Desertificación y la Sequía se hizo con el apoyo del proyecto “Resiliencia a la Sequía: Fortalecimiento de capacidades para mejorar la seguridad alimentaria y la resiliencia ante sequía en Haití y República Dominicana”, que se ejecuta en el país con el financiamiento de la Unión Europea.