Los arrecifes de coral, son uno de los ecosistemas más biodiversos y productivos del mundo. Desde hace 10 años alianzas sostenibles con el sector privado lograron llevar restauración de corales a dominicanos.

 

El Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales informó que la República Dominicana y Costa Rica aunarán esfuerzos y coordinarán acciones para la protección y manejo sostenible de los recursos naturales y, especialmente, en programas de restauración de corales y en los incentivos y mecanismos financieros para la conservación.

 

Explica que Costa Rica brindará capacitación técnica sobre los mecanismos financieros que ha implementado para la preservación del patrimonio natural del Estado  a una delegación de República Dominicana que,  junto a representantes del Consorcio Dominicano de Restauración Costera, viajaron al país centroamericano para conocer su experiencia en la materia.

 

Durante el encuentro inicial con la Delegación, Grettel Vega Arce, Directora Ejecutiva del Sistema Nacional de Áreas de Conservación (SINAC) de Costa Rica manifestó, “hemos aprendido que las políticas de protección y manejo sostenible de los recursos naturales, en particular de los bosques y áreas silvestres protegidas, y de las zonas marinas costeras, no pueden desvincularse de las estrategias de desarrollo del país”.

 

Agrega la nota que esta iniciativa se realiza en el marco del proyecto de cooperación triangular que implementan los gobiernos de Costa Rica, República Dominicana y Alemania, por medio de la Cooperación alemana para el desarrollo, GIZ,  “y que busca desarrollar un mecanismo financiero innovador para la conservación de arrecifes de coral en República Dominicana y transferir la experiencia de jardinería de corales con vinculación del sector privado que se ha generado durante los últimos 10 años en la República Dominicana”.

 

De su lado,  la Viceministra de Agua y Mares, Haydée Rodríguez Romero, destacó que “Costa Rica ha realizado esfuerzos significativos para preservar el legado de las futuras generaciones. Sucesivamente pasamos de los más ortodoxos subsidios, a los incentivos fiscales y dimos el salto hacia los certificados  de conservación y uso de bosque, para finalizar en el sistema de valoración y pago por servicios ambientales. Esta variada gama de experiencias ha evolucionado  gradualmente, tanto desde la perspectiva conceptual, como de la política hacendaria, lo que ha permitido alcanzar los éxitos que se nos reconocen hoy”.

 

De acuerdo a la experiencia país, los recursos del gobierno no son suficientes para la recuperación de los arrecifes degradados y para la protección de los mismos. Por esto, es imperativo crear nuevos mecanismos de financiamiento que promuevan un mayor involucramiento de la sociedad civil y de los sectores productivos, en las acciones de conservación de estos importantes ecosistemas.

 

En ese sentido, Nina Lisenko, directora de Costeros y Marinos del Ministerio del Medio Ambiente y Recursos Naturales de la República Dominicana, explicó que, “durante varios años, el programa de conservación y  restauración de arrecifes fue ejecutado sólo por el Ministerio y, para fortalecerlo, se unió con el sector privado e hizo alianzas internacionales en las acciones de conservación de esos importantes ecosistemas”.

 

Sobre los arrecifes de coral

 

Los arrecifes de coral son de los ecosistemas más biodiversos y productivos del mundo y vitales para muchos procesos ecológicos que se dan en la zona costera, inter-mareal y marina  porque  ayudan a disminuir la erosión y a producir la arena que forma las playas; estabilizan la costa, ofrecen refugio, alimentación y protección a una gran variedad de especies, son las barreras que rompen olas naturales y proveen espacios de recreación.

 

Por otra parte, los principales servicios eco-sistémicos que ofrecen los arrecifes de coral incluyen brindar alimentos y recursos a más de 500 millones personas en todo el mundo. Según datos de la ONU, el valor de una hectárea de arrecife de coral en términos de turismo, protección costera y pesca es, en promedio, 130.000 dólares por año, y puede llegar hasta 1,25 millones donde el sector turístico es grande.

 

Según la GIZ, en República Dominicana los arrecifes coralinos brindan beneficios calculados en más de US$1.140 millones anuales sólo en las costas de Punta Cana, Samaná y Bayahibe.